SABIDURIIA

Aldo Lagrutta

Justo antes de irse a dormir, haga lo siguiente:
1. Recuerde todos los juicios que se haya hecho a sí mismodurante el día, hayan sido expresados o no.
2. Enfóquese en el primero y dígase a sí mismo: "Me perdonopor juzgarme a mí mismo como un (lo que sea que haya sidoel juicio)."
3. Haga lo mismo para cada uno de lo juicios, pequeños ygrandes.
Por ejemplo: "Me perdono a mí mismo por juzgarme al decirque como demasiado y ejercito muy poco para perder peso."
Por ejemplo: "Me perdono a mí mismo por juzgarme como unapersona irritable y difícil para establecer relacionesarmoniozas."
Por ejemplo: "Me perdono a mí mismo por juzgarme comosentencioso o demasiado crítico con mi pareja."
4. Recuerde todos sus éxitos del día, grandes o pequeños.
5. Enfóquese en el primero y dígase a sí mismo: "Tefelicito por (cualquiera haya sido el éxito).
6. Hago lo mismo para cada uno de lo juicios, pequeños ygrandes.
Por ejemplo: "Te felicito por recordar el regar las plantashoy."
Por ejemplo: "Te felicito por el gran trabajo que hicisteescribiendo esa carta de noticias hoy."
Por ejemplo: "Te felicito por cocinar una cena tandeliciosa que todos disfrutaron."
Con el tiempo, notará que duerme major, se despierta conmejor humor, y sus éxitos se incrementan, al tiempo que susjuicios disminuyen.
No obstante, si usted se encuntra a sí mismo juzgándosedurante el día, inmediatamente diga: "No quise decir esto.Soy una persona extraordinaria, y a veces aprendocometiendo errores."
¡Eso es todo!
Si practica esto de modo consistente, se sentirá mejorconsigo mismo, y sus resultados mejorarán. Los resultadosserán graduales y progresivos, pero muy profundos.